Compañia Roukutral
"Siempre listas y alertas"
Conocida como el “corazón” del grupo, las guías es la etapa donde se busca enseñar las principales especialidades del método Scout, conocimiento que les servirá tanto dentro como fuera del Grupo.
Esta sección se compone de Scouts entre 7° básico y I° medio. La Compañía está subdividida en 8 patrullas, llamadas Nahuel, Rabilargo, Albatro, Suricata, Quetzal, Bengalí, Curiman y Acañir. Cada patrulla tiene una Guía y Sub-guía que están a cargo, y son las líderes de sus patrullas.
Las guías se caracterizan por tener una vida más independiente y se les entregan las herramientas necesarias para aprender a valerse por si mismas, tanto dentro como fuera del grupo, teniendo de ejemplo a las mayores de cada patrulla, quienes se preocupan por el avance personal y colectivo de cada una.
Es gracias a esta misma independencia, que las patrullas para las guías pasan a ser una familia, en donde su historia y su legado en el grupo perdura a lo largo de los años. Este es un punto vital para las competencias que se llevan a cabo en la sección, lo que termina generando amistades muy fuertes dentro de las patrullas a pesar de la diferencia de edad.
LEY GUIA
Fundamento: El scout ama y sirve a Dios
1. Es leal
2. Es digno de confianza
3. Sirve sin esperar nada a cambio
4. Comparte con todos y se une a la comunidad
5. Es alegre y cordial
6. Cuida la naturaleza porque en ellos encuentra a Dios
7. Sabe obedecer y nada hace a medias
8. Es optimista para enfrentar las dificultades
9. Cuida las cosas y valora el trabajo
10. Es puro de pensamiento, palabra y obra
PROMESA GUIAS
Por mi honor y con la gracia de Dios, yo..., prometo ante ustedes vivir fielmente los principios Dios, Patria y Hogar, cumplir la ley scout y estar siempre listo para amar y hacer la voluntad de Dios.
Para esto pido la intercesión de Santa Juana de Arco, San Anselmo y la oración de cada uno de ustedes.
SANTA JUANA DE ARCO
Patrona de Francia y Doncella de Orleáns, 30 de Mayo
Una jovencita de 13 años, de Domrey (Francia), llamada Juana de Arco, mientras rezaba en la iglesia de su pueblo, oyó voces misteriosas que la invitaban a liberar a Francia que estaba dominada en gran parte por los ingleses.
El rey de Francia confía en Juana para la lucha contra los ingleses y ella va adquiriendo cada vez mayor fama. En una emboscada cayó prisionera en manos del conde de Luxemburgo, que la entregó a los ingleses por un rescate digno de un rey. La heroica joven, encerrada en una cárcel militar contra toda ley eclesiástica, no pudo hacer llegar su voz a Roma y sus enemigos triunfaron y la condenaron a la hoguera. El atroz suplicio tuvo lugar en Rouen el 30 de mayo de 1431. Juana tenía 19 años.
Los actos del proceso fueron sometidos a revisión entre el 1450 y el 1456, y con la absolución de la imputada comenzó un irresistible desarrollo de veneración de la valiente Juana de Arco, por su fe pura y su genuino amor por la justicia y la verdad, llevados hasta el extremo sacrificio. En 1920 el Papa Benedicto XV la elevó al honor de los altares.